lunes, 28 de enero de 2008

Interpretaciones - Múltiples, únicas o no consecutivas.

Me preguntaron el significado de la letra de una canción. Di una respuesta que me pareció genial los primeros cinco minutos, y patética los siguientes tres días así que, como para defender mis dudosas cualidades de “receptor”, dejo este texto. Gracias a todos por los comentarios y en este caso, a Natalia y sus amigos, participes involuntarios de esta farsa.

Saludos.
Sergio.

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La interpretación de una obra artística es un ejercicio de características tan bastas y complejas como puede serlo la obra misma. Empiezo a escribir esto sin entender del todo los datos que me propuse estudiar para el tema o, lo que es peor, malinterpretándolos. Así que ya se imaginarán. Siento decir que no habrá aquí, explicaciones sobre aquellas letras de canciones incomprendidas. Habrá, en cambio, el principio de varias ideas, abandonadas dos párrafos después.

Es evidente que la obra artística plantea un reto para todos nosotros: su correcta interpretación. Pero ¿existe tal cosa? En primer lugar, habrá que decidir que postura adoptamos. Están aquellos que piensan que existe solo un significado “correcto” y otros que suscriben la múltiple interpretación de una misma obra.

El artista crea con un objetivo y aquellos que intencionalmente no se plantean un objetivo, sin quererlo ya lo tienen: el no-objetivo. Las letras de las canciones siempre quieren decir algo y no otra cosa. Ya sea en un lenguaje directo o en metáforas elaboradas, el compositor intentó expresar algo, buscó un efecto, aludió a un tema. Con esto, podríamos alentar la primera teoría: hay un significado único y original y cuando los “espectadores” fallan en leerlo, pues están equivocados.


Veamos lo que dice un texto que encontré por ahí sobre el razonamiento en el arte. Su autor es un tal Shari Tishman, de la Universidad de Harvard.

“El interpretar una obra de arte es explicar lo que ésta significa. El razonamiento sobre el arte significa el tratar de construir buenas interpretaciones. Para esto debe prestarse mucha atención a lo que nos dicen nuestros ojos y sentidos acerca de la obra de arte, y pensar cuidadosamente sobre dichas observaciones”.

Y sigue así, elaborando un manual de cómo interpretar racionalmente el arte. Este pascual (jajaja a veces disfruto mucho escribiendo en esta página) quiere defender la múltiple interpretación y hace exactamente lo contrario. A ver: si existe algo así como una “buena” interpretación del arte, eso quiere decir que hay algunas interpretaciones “mejores” que otras. Y por lo tanto, hay UNA interpretación que será mejor que todas las demás. La original del artista. Es cierto que cuanto más instruido esté una persona, más sustento tendrá su teoría interpretativa, pero eso no la hace correcta.

¿Será que no hay interpretaciones correcta, sino individuales?

Llegamos a la segunda teoría, ciertamente más popular que la primera. Existen múltiples interpretaciones para una obra y si bien habrá algunas más fundamentadas que otras, difícilmente pueda hablarse de “correctas”. Esta línea de razonamiento está más probada. Cada persona que ve algo distinto en una misma obra, la ratifica.

Diálogo de la película “El Mediador”:

- Me gustó Shane.
- Si, Shane está bien, aunque prefiero los Westerns que terminan con el héroe vivo. Como Río Bravo.
- Creo que te equivocas de película. Shane vive. Al final, lo ves alejándose y ese chico, Brandon De Wilde, lo llama: “Shane, Shane, regresa!”
- Bueno, lamento que sea yo el que te da esta noticia, pero Shane muere.
- Nunca lo ves muerto. Estás suponiendo!
- No, es un error común. En la toma final se desploma de su caballo. Shane no voltea cuando lo llaman porque no puede. Está muerto.
- Se desploma porque está herido. Desplomado no es muerto.
- Supongo que sos de las personas que creen que Butch y Sundance también sobreviven. Aunque no los ves muertos, en la última toma ves que la casa donde están está rodeada y que la balacera está por comenzar.

No es posible decir quién tiene razón. Aún cuando pudiéramos localizar al autor, creo que su opinión tampoco serviría de mucho. Es que soy de la idea de que cuando un artista “lanza” su obra al mundo, pierde el control sobre ella y debe sufrir la “prostitución” de su sentido original en manos de millones de clientes. Por eso los artistas son reacios y contestan de mala gana cuando se les pregunta “que quiso decir con esta u otra cosa?” Porque saben que ya no importa. La obra habló por sí sola, y él no tiene poder alguno sobre los que escuchan.

Además, los rastros de un autor en la obra no son siempre voluntarios. Puede que el artista se exprese en esa obra, pero también puede ser que se oculte, que engañe o que deje señales que ni el mismo pretende dejar, involuntarias. Una canción de amor puede provenir de un compositor enamorado, pero también de otro que fue abandonado y quiere tapar de alguna manera su desesperada situación. Y lo que nosotros vemos como un “canto al amor” es la obra de un desamorado. ¿Cómo es posible encontrar una interpretación correcta en esta maraña?

Debo decir que mis actos suscriben esta teoría, pero mis deseos buscan la primera. Encuentro mucho placer en releer libros una y otra vez o volver a ver viejas películas. En cada lectura o visionado, tomo significados diferentes, mensajes distintos, palabras nuevas y giros desconocidos. Me dejo sorprender cada vez y este acto de ingenuidad me produce un placer inmenso. Me vuelvo a asustar y a emocionar, pese a saber el resultado. Mi pequeño engaño al paso del tiempo. Solo por un instante, aquel lector fuerte e intrigado se fusiona en una confusa imagen con este lector ya malherido y desengañado. Y por unos instantes, no se sabe cual es cual. El placer es doble: volver a sentir las viejas sensaciones y crear nuevas al mismo tiempo.

Aún así, la idea de un significado original me carcome el cerebro. Se que por ahí, dando vueltas, está el verdadero sentido que quiso transmitir el artista y cuando creo haberlo obtenido, lo defiendo a muerte y no tolero fácilmente las contradicciones.

Como verán hablé a favor de las dos teorías. Para justificarlo, me remito a la metodología de una de mis materias-enemigo de la facultad: la semiótica. Allí vemos como se separan dos campos de estudio bien definidos: la producción y el reconocimiento. Y todos los estudios semiológicos se realizan bajo el siguiente precepto: no se pueden estudiar los dos al mismo tiempo. Puede hacerse un análisis sobre las condiciones de producción o sobre las de reconocimento, pero nunca de ambas. Porque no hay un efecto causal: “como el mensaje fue tal, la respuesta del que lo recibe va a ser tal otra”. No funciona así. Se puede estudiar la producción (el área más extensa) o sea, el mensaje, el medio, etc. Pero no se puede incluir en ese estudio, el efecto que tendrá en el receptor. Esto es motivo de otro análisis más complejo, porque incluye elementos que no tienen que ver solo con el mensaje. Hay factores psicológicos, históricos, etc. Es mucho más complicado teorizar la recepción.

Simplificando: por un lado se estudia una obra, su autor, los elementos que tomó para la realización, etc. Por el otro, los efectos de esa obra. Ambos son “válidos” (si se quiere usar esa palabra): la intención del mejor de los artistas y la interpretación del más obtuso de sus receptores que, dentro de su ignorancia, será tocado por la magia del arte.

Pero aún así, aliento la búsqueda del supuesto significado verdadero, aunque este no llegue nunca. Me gusta creer que una obra no termina cuando pretendo haberla entendido. Después de todo, y como dijo Descartes, “hay que creer en lo que todavía no es demostrable. Y para hacerlo, hay que desconfiar del propio razonamiento”.


Y para que vean que esto puede ser tomado con humor, les dejo a otro “incomprendido”. Jajaja nos vemos.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Sergio,
Puedo interpretar tu texto...
Interesante, te felicito!
Francisco.-

Sergio dijo...

Como va Fran! Te agradezco el comentario y nos vemos pronto.

Anónimo dijo...

hola Sergio como andas ? soy lili Santo me gusta mucho tu blog, esta bueno muy interesante. mi mamá tambien lo vio y te felicita tambien. besos . atodos especialemente a Ludo.

Sergio dijo...

Muchas Gracias por el comentario!!! Realmente. Un saludo muy grande a todos. Besos