martes, 13 de octubre de 2009

Dolor - Las Honrosas Heridas


Llega un nuevo comentario a Ecos, una especie de "Pain management" de cuarta categoría.
Dedico este post y su temática a una amiga que, recientemente, perdió mucho. Ojala que pronto puedas pasar a cobrar por caja todas las que el destino te debe.
Sergio.

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La primera referencia al dolor, duele. Porque se trata, directamente, de un recordatorio de nuestra propia mortalidad y de nuestra “imperfección” ante los dioses. En la mayoría de los mitos, religiosos y de los otros también, el dolor aparece como un castigo divino o como una carga propia de los hombres. La evidencia más característica de la “falla” del ser humano. Esto es así salvo para nuestros amigos los griegos o los nórdicos, que sí les dieron a sus dioses la capacidad de sentir dolor algo que , simbólicamente, me parece muy acertado.



Cada sociedad ha utilizado distintos procedimientos para intentar suprimir el dolor. En el siglo I, muchos sabios idearon métodos para disminuir los dolores del parto, por ejemplo. Según Dolina, Apolonio de Tiana aconsejaba introducir en la habitación donde se llevaba adelante el nacimiento, una liebre viva para que saltara y diera giros por el lug ar y distrajera a la parturienta. Plinio señala que en España se acostumbraba a poner la liebre entre los senos de la mujer con el mismo objetivo (por favor, abstenerse de metáforas chuscas jaja). Si esto no resultaba, convocaban a músicos y cantores para ayudar a pasar el trance.

Nótese que no se hacía ninguna aplicación física. Era una manera psicológica de suprimir el dolor (distraer a la psique hacia otro foco de atención), concepto que para muchos, se mantiene vivo hasta hoy. El dolor está más en la mente, que en el cuerpo (esta es otra discusión en la que no entraré).

Dolina nos acerca otra historia: la del príncipe polaco Yanos Kucinich. Era un hombre muy galante y tenía numerosas amantes. Pero un día, un marido celoso dispuso que unos magos lo hechizaran y como resultado, el príncipe comenzó a sentir un dolor muy intenso entre los omóplatos. El dolor era tal, que el príncipe no podía registrar ninguna otra sensación que no fuera ese dolor. Los médicos de la corte no entendían nada, pero los astrólogos le dijeron que el dolor lo acompañarían toda su vida, salvó en un día de cada año: el día de San Juan.

Desde entonces, el príncipe vivió bajo un dolor paralizante, salvo cada 24 de junio, cuando se entregaba a unas fiestas y placeres fenomenales. Al día siguiente, volvía el dolor. Pero acá lo importante. Al cabo de unos años, el príncipe entendió que el éxtasis de ese día estaba contaminado por la certeza de su inmediata terminación al día siguiente. Y que por eso, no podía gozar de ellos. El hecho de saber que el placer se terminaría, no le permitía disfrutar esas 24 horas. Y así, quedó atrapado. Desde entonces, su día de alivio lo utilizaba para sufrir por el dolor que vendía a la jornada siguiente. A través de procedimientos mágicos, los astrólogos le consiguieron nuevos días de gracia: el día de todos los santos, la navidad, la pascua. Pero Kucinich tampoco las aprovechaba y por cada fecha que ganaban sus magos, el sufría el doble. Los días de placer que le conseguían fueron tantos, que en un punto llegó a sentir dolor solo en una jornda por año. Pero ya no importaba. El concepto de lo efímero, lo había dominado e invadido. Pese a tener 364 días libres de dolor, la llegada de aquella única jornada de sufrimiento lo atormentaba. Y pasó su vida llorando en su habitación, mirando por la ventana y esperando la llegada del dolor inevitable, o tal vez el definitivo. Una voz de alerta, entonces, acerca del concepto de lo efímero. En el momento en que toma posesión de nosotros, nunca se va.

Muchos métodos se han inventado desde entonces para esquivar los dolores físicos, pero ninguno para los dolores del alma. Sin embargo, deberíamos preguntarnos si realmente no queremos sentir dolor ante alguna desgracia que nos ha ocurrido. Una cosa es desear la vuelta de alguien amado, pero otra muy distinta, es pretender eliminar el dolor que esa partida causa. Lejos de ser masoquista, yo prefiero el dolor. Es parte de lo que soy y, de alguna manera macabra, define quién soy. Hay que seguir adelante sin ocultar los cuchillos clavados en el pecho.


Querido Will.

Aquí estamos, usted y yo, padeciendo en nuestros respectivos hospitales. Usted con su dolor y yo sin mis libros. Espero que no haya quedado muy feo…que colección de cicatrices tiene! Nunca olvide quién le hizo la mejor de ellas y sea agradecido. Porque nuestras cicatrices tienen el poder de recordarnos que nuestro pasado fue real.

Hannibal Lecter.

De la película "El Dragón Rojo"


Podemos caer paralizados como Kucinich o arrastrar nuestras heridas para lo que venga. Es cierto que aún en el momento de mayor disfrute, aún cuando nos estemos muriendo de la risa, nuestro dolor estará ahí y una pequeña voz susurrante nos dirá “igual te duele. Un día te vas morir, al igual que todos los que te quieren”. Pero de eso se trata, de disfrutar igual. De reírnos de esta vida, la mayor de las parodias, pese a que el telón caerá más tarde o más temprano.

Porque déjenme decirles algo, para quede bien claro. El único modo que existe de eliminar el dolor, es eliminando el placer. Y les aseguro que no vale la pena. Es un precio demasiado alto.

10 comentarios:

Unknown dijo...

Hola serg.... me gusto mucho lo que escribiste. Vos sabes que nunca me atrevi a postear, ya sea por miedo a no ser clara con la idea o simplemente...por no ser tan "diplomatica"... en fin no se si se entendio lo que quise decir...
Lo que si se... es que tus palabras me llegaron al corazon... y creo que vos y yo compartimos algo que creo... que siempre va a estar...
Gracias por todo... todo mi amor... desde lo mas profundo de mi ser.
Te quiero mucho.
Lau

Sergio dijo...

Saber que algunas palabras llegan y sirven, aunque sea un poco, hace muy bien. Muchas gracias Lau y mucha fuerza. Ahora más que nunca.
Te quiero mucho y a no bajar los brazos.

verónik dijo...

hola!! Ser ... afin jaja y sin hacer referencia a entes celestiales y su rango, creo que compartimos mas de una vision,un pensar , un pasar y mirar ...no un seguir sin voltear ante las penas y alegrias vitales ....mortales...
le dejo una reverencia ante sus palabras,dichos y recopilaciones y adjunto un paquetito de besos de fresa sanadores ....y otros tantos alentadores!!!
Veronik

Sergio dijo...

Pasar y mirar. ¿De eso se trata no? El abismo te mira y hay que sostener esa mirada. Y sonreír en la caída. Eso intenté reflejar en el post. Sonreír, pese a estar cayendo.
Muchas gracias por el comentario, muy lindas tus palabras.
Besos.
Sergio

Gise dijo...

Hola...si bien te dije que me da verguenza hacer esto, aca estoy...animandome
Me gusto muuucho lo que escribiste, en definitiva uno mismo tiene su propia definicion o interpretacion de lo que es o lo que sugiere el dolor, yo prefiero quedarme con la simple definicion wikipediana de que el dolor es "una experiencia sensorial y emocional generalmente desagradable que todos disponemos"
soy de las que sigue creyendo que ciertas sensaciones no tienen explicaciones en palabras
cito una frase que repite todo el tiempo una amiga..."las personas dañadas son peligrosas porque saben que pueden sobrevivir"
bueno...pancho jaja, ponete a laburar y afloja con las series..
besos!!!!!

Sergio dijo...

Por NO concentrarme en laburar puedo, de vez en cuando, escribir estas cosas, asi que si queres mas post tenes que alentar mi postura de pancho. jajaja. Con respecto a la definición de tu amiga es buena, aunque me gustaría entenderla un poco mejor.
Bueno gracias por el post. Y colaborá para la colecta "manos para el Pato". jajaja
Besos.

Athos dijo...

Sentir mucho... All the time!
El dolor nos recuerda que estamos vivos... La felicidad nos permite disfrutar de la vida... El tiempo nos enseña a aprender del dolor y a ser felices con lo que podemos disfrutar.
O debería xD
En conclusión... El cuervo 1 es negro, el cuervo 2...
Y el ouróboro cobró vida! Jijiji!
Saludos desde Montecristo ;)

Sergio dijo...

Lo primero que le pediría al tiempo que me enseñe, es a volver para atrás. jajaja. Lamentablemente, sus métodos de enseñanza son muy estrictos y tienden a dejar cicatrices. Bueno, que así sea. Prefiero eso antes que negar el aprendizaje.
Si el Ouroboros cobra vida, sería justo que lo primero que haga sea morderme...jajaja
Un beso y gracias por el comentario.

MIRIAM MIKI GONZALEZ dijo...

HOLA SERGIO, ENTRE A TU BLOG BUSCANDO IMAGENES SOBRE DOLOR PARA HACER UN TRABAJO. ME IMPACTO TU ESCRITO, ESTOY CASI EN UN 99 POR CIENTO DE ACUERDO. ME GSUTA QUE HAYAS TRANSCRIPTO AL TROESMA DOINA. Y ES VERDAD, YOPADEZCO DOLORES TERRIBLES DESDE MHACE MUCHOS AÑOS, NUEVE DE LOS ULTIMOS SIN CAMINAR Y 16 OPERACIONES. NI QUE DECIRTE QUE AGRADEZCO TANTO TIEMPO QUE ME DIO EL DOLOR PARA PODER TOMARME "VACACIONES" Y ENTRE OTRAS COSAS TENER TIEMPO PARA HACER DOS CARRERAS UNIVERSITARIAS MAS, LEER HASTA EL MISMO FIN DE LA PALABRA, ESCUCHAR MUSICA, APRENDER COMPUTACION Y SEGUIR RECOLECTANDO AMIGOS A CADA PASO. SOY FELIZ, ES ESA LA CERTGEZA. GRACIAS POR TU MARAVILLOSO ESCRITO. MIKI

Ángel Reyes Burgos dijo...

He dado con este blog, buscando una imagen sobre el dolor en la vida para acompañarla de un poema en mi blog que se llama, Que manera de doler tiene la vida. Esto de antares me sonaba de una una asociación en Sevilla para ayuda a toxicómanos y por eso me quede un ratito a leeros. Hermosas entradas que leeré con mas detenimiento. Que tengan un lindo día.